Peligros de Ana y Mía en internet: anorexia y bulimia ocultas

Ana y Mía promueven trastornos alimenticios online. Conoce su impacto en adolescentes y cómo detectarlos y prevenirlos.
En este artículo hablamos de:

¿Alguna vez has escuchado a alguien hablar de «Ana» o de «Mía» como si fueran personas reales? Detrás de esos nombres, aparentemente inofensivos, se esconden comunidades digitales que promueven trastornos alimenticios graves como la anorexia y la bulimia.

En este artículo te explicamos qué son Ana y Mía, por qué afectan especialmente a chicas jóvenes, cómo se cuelan en redes sociales, qué señales pueden ayudarnos a detectarlas; y qué es lo que podemos hacer desde un enfoque preventivo.

¿Qué significan Ana y Mía en la red?

Ana y Mía son los nombres con los que se hace referencia, de forma encubierta, a la anorexia y a la bulimia. En lugar de tratar estas enfermedades como problemas de salud mental, muchas páginas y perfiles las presentan como un estilo de vida.

Tal y como Federica Deiana comenta en el artículo escrito para la Revista de Antropología Iberoamericana, bajo estos nombres se crean rituales y normas que giran en torno a la delgadez extrema: se comparten retos, dietas y frases motivadoras que promueven conductas y actitudes peligrosas para la salud.

Lo preocupante es que estos espacios no solo dan ideas, sino que crean comunidad. No obstante, lo que parece una red de apoyo, en realidad les empuja más profundamente a la enfermedad.

Niñas anorexia

¿Por qué afectan especialmente a adolescentes y niñas?

Durante la adolescencia, la imagen corporal se convierte en algo muy importante. Es una etapa donde gustar, pertenecer y encajar es importante. Si además se pasan muchas horas en redes sociales donde se ven cuerpos perfectos, es fácil que se empiece a pensar que solo siendo una persona delgada vas a ser querida y feliz.

El estudio de Vizoso y Gómez (2025) muestra que muchas adolescentes se sienten mal con su cuerpo tras compararse con otros en plataformas como Instagram o TikTok. Si además sumamos la presión, la búsqueda de identidad o la falta de autoestima, los espacios digitales pro-Ana y pro-Mía aparecen como una “solución” a sus inseguridades.

Redes sociales y foros: el papel de internet en la difusión de los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA)

Aunque muchas plataformas han empezado a borrar este tipo de contenido, las comunidades pro-Ana y pro-Mía siguen activas. Usan emoticonos, faltas de ortografía y palabras clave para esquivar los filtros. Por ejemplo:

  • Hashtags como #thinspo, #anahelp, #miafamily
  • Frases tipo: “sin dolor no hay belleza”, “el hambre es un signo de éxito”
  • Retos de ayuno o dietas extremas disfrazadas de “hábitos saludables”
  • Imágenes de cuerpos muy delgados acompañadas de mensajes que los elogian

Según la Asociación Contra la Anorexia y la Bulimia (ACAB), hay foros y cuentas privadas donde se intercambian trucos para vomitar sin que se note, esconder la comida o simular estar bien para que nadie sospeche. En estas cuentas podemos encontrar fragmentos, recogidos de manera literal, como: 

  • “Prueba la comida y escupela. Repítelo cuantas veces necesites para calmar la ansiedad”
  • “No te arrodilles frente a la taza. Quédate de pie inclinada hacia delante, es mucho más sencillo que salga así la comida”
  • “Agarra una agendota y escribe que comiste y cuantas calorías tienen cada cosa. Al final del día suma todo al principio del día siguiente, ponte un límite de calorías siempre menos del día anterior” 

Este tipo de mensajes, disfrazados de “consejos”, refuerzan prácticas muy dañinas y perpetúan la enfermedad.

Consecuencias físicas y psicológicas de los TCA

A pesar de que a veces parece que se trata solo de “querer estar delgada”, los TCA son enfermedades complejas que pueden afectar gravemente a la salud física y psicológica:

Ana y Mía

Cómo detectar señales de alarma en jóvenes

Teniendo en cuenta que muchas veces quien lo sufre no se da cuenta o niega la enfermedad, es importante que las familias estemos atentas. Por ello, a continuación se presentan señales que pueden servir de alerta:

  • Evita comer con otras personas o empieza a inventar excusas para no comer.
  • Se pesa constantemente o revisa las calorías de todo.
  • Usa ropa muy ancha para ocultar su cuerpo.
  • Se encierra en el baño justo después de comer.
  • Habla mal de su cuerpo o se compara con otras personas.
  • Sigue cuentas sospechosas en redes.
  • Tiene cambios de humor, se aísla o presenta un cansancio extremo.

Si se observan varios de estos indicios, lo mejor es crear un espacio seguro de comunicación, mostrando preocupación y preguntando con calma.

Prevención y apoyo

Por último, como sabemos la mejor intervención tiene que tener un enfoque preventivo. No se trata de prohibir las redes sociales o adoptar una actitud controladora, sino de acompañar y educar con empatía. A continuación, se recogen diferentes consejos para el proceso de acompañamiento de nuestros hijos e hijas: 

Chicas anorexicas

Si hay sospechas o diagnóstico de un TCA, es fundamental pedir ayuda especializada. Psicólogos, nutricionistas, médicos y orientadores pueden formar un equipo que ayude a la recuperación.

Recursos e-tic

Imagen de Amaia Ulazia Zandueta

Amaia Ulazia Zandueta

Profesora de Educación Infantil y Primaria especializada en Pedagogía Terapéutica y Educación Sexual.

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